Llegamos a Besalú, aparcamos el coche y nos dirigimos hacia el núcleo antiguo. Llegamos al puente y lo atravesamos, en este transitar, si lo hacemos durante el primer fin de semana de septiembre podremos viajar a través del tiempo y descubrir cómo era la vida en la Edad Media en una tierra de caballeros, trovadores, torneos y antiguos oficios.
Con un núcleo medieval perfectamente conservado, Besalú no necesita decorados para recrear los tiempos en que, como capital de condado, gozaba de una rica vida urbana. Estos días, el pueblo se llenará de visitantes, por lo que, si llegas en vehículo propio, lo mejor será que lo aparques a las afueras y accedas al núcleo antiguo a pie. Justo después de cruzar el puente, comenzarás a respirar aires de fiesta acompañado por los personajes más singulares.
Por las estrechas calles te cruzarás con trovadores que te cautivarán con sus historias, y con músicos, artesanos y malabaristas que entretendrán con sus artes a pequeños y mayores. Soldados, mercaderes, mendigos... todos los tipos que poblaban las antiguas ciudades medievales pueden estar detrás de cualquier esquina para sorprenderte y transportarte a otra época. Los abanderados, blandiendo coloridas banderas con escudos de armas, recorrerán las calles del centro al ritmo de la música, que inundará la ciudad durante todo el fin de semana. Y es que en Besalú, estos días, cultura y ocio coinciden en una completa agenda de actos con opciones para todos los gustos y edades.

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